1) Hacer un Asado. Si, es trillado; pero
debería existir una prueba para poder obtener el DNI que incluya hacer un
asado. No importa el corte de carne que tires a la parrilla, no importa como
salga y que chimichurri uses; pero prender el carbón y sacar carne cocida de la
parrilla es FUNDAMENTAL.
2) Pegarle a una pelota de fútbol. Mas
allá del deporte que practiques y aunque no hagas ninguno, tenés que saber dar
un pase y pegarle (minimamente) con tres lados del botín, empeine, abriendo el
pie y tres dedos.
3)
Saludar con
apodos. No es necesario conocer a la otra persona para llamarlo campeón, maestro, grosso, capo, negro,
pelado, etc. Esto incluye a las mujeres también… Flaca, morocha, rubia, linda, madre…
4)
Saber insultar.
No basta con algo insulso como tonto, bobo o tarado. Hay que convertir nuestra
boca en una cloaca anegada desde el siglo XVII y acordarnos hasta de sus
parientes más remotos. El Guachon es un claro ejemplo.
5)
Bailar
Cuarteto. Es mentira que el argentino baila tango, el argento hecho y
derecho baila cuarteto, sin importar clase social o credo. Porque no tenes que ser Piquin, solo tenés
que moverte para atrás y para adelante quebrando un poco las rodillas de vez en
cuando y por supuesto acompañado de…
6) Saber preparar un fernet. Esa bebida
que quita la sed y emborracha al mismo tiempo, es perfecta para acompañar una
entrada de fiambres, snacks, pizza o la más rica carne asada. Cuidado de aquel
que intente prepararlo con Pepsi en vez de Coca o peor aun, con Coca Zero o
Light… Esos herejes no solo se les quitara la nacionalidad, sino que serán
condenados a vivir en el infierno.
7) Creerse mejor que alguien. El argento
siempre es un poquito mejor que los demás en algo y no importa en que, pero se
lo tenemos que hacer notar a veces para que no se lo olviden. No es cuestión de
alardear, sino de que nos sentimos en la obligación de serlo por los ilustres
que nos preceden. Maradona, Fangio, Messi, Ginobili, Favaloro, Lucha Aymar,
Borges, San Martin, Charly García, Spinetta, Pappo, etc.
8) Hablar de fierros. No interesa el nivel
de conocimiento que tengas del mundillo tuerca,
si podes armar un reactor nuclear con unos Legos o si te cuesta cambiar una
lamparita, todo argento que se digne de serlo sabe un poco de autos y motos.
Modelos, marcas, prestaciones, defectos y virtudes; todo suma con tal de
aportar un comentario. Por eso…
9) Hay que ser opinólogo. Tiene que saber
un poco de todo y aportar un bocadillo siempre que se de la oportunidad. Un
argentino sabe de lo que sea que se le pregunta y opinara convencido de tener
la absoluta verdad, si no lo hace su DNI le explotara en el bolsillo.
10) Para un argento la madre y los amigos están
primeros que nadie. Podes hacerle bromas sobre su mujer, su prima, su perro
y hasta de sus hijos; pero a un argento no le toques a la vieja y a los amigos.
Aunque existe un apartado especial que es…
11) Todo argento es hincha de un club de
fútbol. Por más que nunca fue a la cancha a alentarlo, es hincha de un
club. Por mas que no entienda una goma de fútbol, es hincha de un club; y por eso
lo defenderá a muerte, se insultara con quien sea y apostara un fernet contra
un hincha del equipo rival de turno.
12) El argentino es bueno para quejarse. 1
de cada 10 palabras en una frase, es una queja sobre algo, es mas, se puede
quejar de lo que sea! Imaginen un tema, cualquiera, el primero que se les venga a la
cabeza… y te puedo asegurar que un argento ya se quejo sobre eso mas de 100
veces en una charla de 5 minutos aunque también sabemos que…
13) Todo argentino exagera cuando habla.
Con tal de respaldar una idea, de hacerla mas factible o convincente, un
argento exagera hasta las cosas mas estupidas. Nuestra Secretaria de Asuntos
Exagerados esta convencido de que este tema lo escribió San Martin antes de
cruzar los Andes.
14) Tomar mate una vez al día. Si hace
calor, se toma con agua fría… no es excusa. Hasta que uno aprende a cebarlo se toma como le
sale, si quemo la yerba se aguanta. Si se puede que sea amargo, de lo contrario
que sea dulce… pero no me vengan con esa estupidez de ponerle edulcorante y cosas raras. Usted
podrá quedarse tranquilo cuando le salga con espumita después de varias cebadas.
15) Por ultimo, y claramente mas importante, el
argento debe de saber chamuyar. Envolviendo a su interlocutor con palabras y
frases bonitas hace que caiga en su red y lo tenga de su parte, y hasta puede venderle
un reloj a un ciego. Chamuyando un argento es que despierta su creatividad innata
y puede desarrollar al maximo su capacidad de exagerar, opinar o quejarse hasta
llegar al punto de escribir sobre ello en un blog berreta [¬_¬]… La base de la argentinidad es el CHAMUYO.
